La Estacada acogió un vibrante encuentro en la tarde del sábado, con dos equipos que lo dejaron todo sobre el terreno de juego pese a terminar el partido con resultado a gafas.
El partido comenzaba con un Fraga muy bien plantando en el terreno de juego, que no tardó en coger las riendas del encuentro enlazando diversas combinaciones en el centro del campo. Pese al buen inicio, la zaga del Barbastro se mostró infranqueable en todo momento para los atacantes rojillos. Transcurrido el primer cuarto de hora, los visitantes comenzaron a intensificar su presión en campo fragatino y el juego directo se apoderó del partido. Sin apenas ocasiones, una llegada por parte de cada conjunto, se llegó al descanso.
El paso por los vestuarios le sentó mejor al cuadro del somontano, que inició la segunda parte a un gran ritmo, superando a los locales en intensidad en cada acción, pese a ello, no lograron inquietar a Cristian. Transcurridos los primeros diez minutos de la segunda mitad que hacían presagiar lo peor, el Fraga sacó fuerzas de donde no las había y volvió a ir a por el encuentro.
En los últimos minutos, un Barbastro que veía como se le escapaban sus opciones de pelear por el ascenso, se volcó en ataque incorporando a su central como delantero. Esto permitió que los fragatinos encontraran huecos a la espalda de la defensa barbastrense. Prácticamente en el tiempo añadido, los locales llegaron a desperdiciar hasta tres ocasiones manifiestas de gol, destacando una excepcional intervención del guardameta visitante a un disparo lejano de Moha.
Partido que nos sirve para refrendar la mejora del equipo en la segunda vuelta, empatando contra el único equipo de la liga contra el que todavía no habiamos sumado. Destacar del partido la labor defensiva del equipo, dejando la portería a cero contra el mejor ataque de la categoría.